domingo, 5 de junio de 2011

LA SUPUESTA FELICIDAD DEL AMOR...


Las relaciones afectivas al menos en nuestra sociedad no están vacías de problemas. Cada amor arrastra su propio lastre que le impide volar. Pienso que existen factores que transforman lo que realmente es el amor, uno de éstos está en que desde pequeños nos han enseñado que necesitamos ser amados, otra cosa que considero influye es la idea de que el amor es absoluto, estático, único, y que consciente o inconscientemente está en el pensamiento adaptado de las personas.


Establecer un vínculo afectivo es dar inicio a un intercambio de lo que verdaderamente uno es, es imposible sólo entregar lo bueno y esconder lo malo, podemos disimular defectos al comienzo, pero con el tiempo corto o largo las verdaderas máscaras salen a relucir.


El amor es expresar lo que realmente uno es, sin máscaras, sin mentiras, sin disimulos, es una desnudez psicológica que a veces nos asusta. No voy a excluir los buenos momentos y placeres que nos trae una relación amorosa porque eso sería una estupidez, pero lo que pretendo decir es que si conocemos el agua que nos moja, estamos alerta y evitaremos sorpresas desagradables.

sábado, 29 de enero de 2011

YO PROMETO...

Proponiendonos metas cortas, con tranquilidad y seguridad muchas veces es muy beneficioso para nosotros mismos! Día a día me prometo cosas que cumpliré sólo por hoy, sólo viviendo el aquí y el ahora..

YO PROMETO...

Ser fuerte hasta el punto que nada pueda perturbar mi serenidad de espiritu:

Hablar de salud, de felicidad y de prosperidad a toda persona que yo encuentre;

Inculcar a mis amigos la confianza en ellos mismos;

No considerar más que el lado bueno de las cosas, ese es el verdadero optimismo

No soñar más que lo mejor, de no trabajar más que por o mejor y de no esperar más que lo mejor

Manifestar tanto entusiasmo por los éxitos de otros como por los míos

Olvidar los errores pasados y ver de hacer mejor en el futuro;

Tener siempre en espiritu alegre y la sonrisa para toda persona que yo encuentre;

Consagrar tanto de mi tiempo a mejorarme a mmí mismo que yo no tenga tiempo para criticar a los demás;


domingo, 16 de enero de 2011

RESPONSABILIDAD FRENTE AL SUICIDIO

Dorys Amanda Maltez y Vicente Maltez Montiel

Demasiadas personas de todas las edades acaban sus valiosas vidas innecesariamente. Cada 30-40 segundos alguien se quita la vida, resultando más de un millón de fallecidos cada año; ésta es la tercera causa de muertes violentas en adultos jóvenes, después de homicidios y guerras. El suicidio se ha convertido en un problema de salud pública.

En el período 2001-2008 se suicidaron en nuestro país 1,353 personas, la mayoría del sexo masculino, entre los 15 y 45 años, recurriendo al estrangulamiento y las intoxicaciones. Las causas reportadas en su mayoría son desconocidas, pasionales y por conflictos familiares. El desempleo y las labores agrícolas, así como la educación primaria y secundaria, son otras de las características.

Las estadísticas de suicidios no son completas porque produce vergüenza en las familias de los afectados y no se reportan de un 10 a un 15 por ciento de los fallecidos. Por cada suicidio ocurren 20 intentos

Más que de suicidios, debemos hablar de conductas suicidas, un acto mortal con intención autodestructiva, y el intento de suicidio en el que no se alcanza la muerte por falta de intención de morir, porque el método empleado fue inadecuado o por recibir pronta y eficaz intervención.

Al evaluar un caso suicida encontramos más de un factor de riesgo involucrado y es un proceso que afecta a todas las edades. Son factores predisponentes: enfermedades mentales, en especial depresión, alcoholismo, esquizofrenia; intentos previos de suicidio, pertenecer al sexo masculino, enfermedades incurables y dolorosas como cáncer, sida, neuralgias, epilepsias, etc., y tener una baja tolerancia a frustraciones y alta impulsivida

Precipitan la decisión suicida todas las situaciones de pérdida (seres queridos, empleos, económicas y sociales), vivir situaciones insostenibles que el sujeto las siente no superables, así como estrés intenso agudo que pudiera derivarse de cambios políticos y económicos, vergüenzas y sentimientos de culpabilidad.

Un factor que facilita la resolución suicida es la posibilidad de tener acceso a medios efectivos para quitarse la valiosa existencia, como plaguicidas (la famosa “pastilla del amor” en Nicaragua), armas de fuego o sicofármacos. Es oportuno comentar que cualquier ayuda a un suicidio constituye delito de “auxilio al suicidio”, que se castiga con penas de cárcel.

Siempre deberemos considerar con profunda responsabilidad nuestra posición frente a la conducta suicida. Un potencial suicida puede estarnos diciendo en forma de broma sus intenciones y habrá que tomarlo en serio. La ideación suicida es una emergencia de salud mental que obliga a buscar asistencia profesional.

En la lucha contra las conductas suicidas destacan la promoción de factores de protección anti-suicidio: la estabilidad y funcionamiento familiar, buena integración social (participación) y buenas relaciones humanas en todos los círculos donde se desenvuelve. Juega un importante papel el incentivar una alta autoestima, desarrollo armónico de la personalidad y saber identificar cuándo necesita ayuda.

Hay tres niveles de prevención del suicidio según Leavell y Clark: la promoción primaria son acciones que tratan de impedir que una enfermedad aparezca en un individuo determinado y se logra aumentando la resistencia a las enfermedades en sentido general y la protección específica como la que dan las vacunas.

A través de la identificación y tratamiento temprano de una enfermedad cuando ésta se ha manifestado, se desarrolla la prevención secundaria. Un tercer nivel de prevención o terciario consistirá en minimizar los daños y discapacidades de las enfermedades.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha demostrado que no basta actuar sólo en la mente de un potencial suicida, ya que “se puede lograr un impacto mayor y mas rápido cuando se actúa sobre el ambiente externo”. En este sentido, todos deberíamos sentirnos responsables de contribuir a la disminución de la mortalidad por la conducta suicida en nuestro país.

jueves, 6 de mayo de 2010

¡EL AMOR NO ES SÓLO UN SENTIMIENTO. ES TAMBIÉN ARTE!”


“Sin vos no puedo vivir”, “Mi vida sin vos no tiene sentido”, “No vale la pena vivir sin vos”, “Ella lo es todo para mí”, “Él es lo más importante en mi vida”, en fin, la lista de expresiones de amor, es interminable y bastante común para los corazones “enamorados”, pensamos que estas afirmaciones son muestras de amor y representaciones de un sentimiento incondicional, la tradición ha pretendido hacernos ver que “el autentico amor debe estar infectado de adicción”, lo cual para mi es una completa locura.

La epidemiologia del apego es agobiante, según los expertos la mitad de la consulta psicológica es debido a problemas ocasionados o relacionados a dependencia patológica interpersonal, es decir las personas no se resignan a la ruptura o permanecen inexplicablemente en una relación tóxica.

La inmadurez emocional, es el esquema central de todo apego, para algunas personas este término puede resultar ofensivo, pero no se trata de estupidez o retardo, para las personas que aún no han desarrollado una madurez emocional adecuada tendrán dificultades ante el sufrimiento, la frustración y la incertidumbre, pero en sí el término “inmadurez” se acopla mejor al insuficiente autocontrol que suelen mostrar los individuos que no toleran las emociones, siendo así estancadas en su crecimiento emocional en ciertas áreas de su vida, pero en otras funcionan maravillosamente.

“Me causas vergüenza”, “me fastidias”, “No sirves para nada”, ¿Qué nos lleva a resistir este tipo de maltrato? ¿Por qué esperar hasta desenamorarnos para darle un fin a la relación? Este es un enfoque similar a los problemas utilizados de farmacodependencia, donde el adicto debe dejar la droga pese a sus ganas, donde aun así necesitando la droga sean capaces de pelear contra los deseos, no considero necesario que hay que esperar hasta desenamorarse para darle un fin a la relación, tiene primero que aprender a superar los miedos que existen detrás del apego, levantar el autoestima y auto respeto, luchar contra los deseos por qué sabe que no le conviene. El desamor no lo logrará de la noche a la mañana, es un proceso que llegará después.

Cuando empiece a independizarse se dará cuenta que lo que sentía no era “amor”, sino más bien una adicción psicológica, no existe otra solución más que librarse de él/ella sintiendo que lo quiere pero que no le conviene. El diagnóstico a la adicción que plantea el Psicólogo y experto en terapia cognitiva Walter Riso, los fundamenta en estos puntos:

• La ausencia de la persona “amada”, o no poder tener contacto con él/ella produce un completo síndrome de abstinencia.
• Existe un gran deseo de dejarlo, pero los intentos son infructuosos y pocos contundentes.
• Invertir una gran cantidad de tiempo para poder estar con él, a cualquier precio, encima de todo.
• Reducción y alteración normal en su desarrollo social, laboral y recreativo, debido a la relación.
• Seguir alimentando la relación a pesar de estar conscientes de las graves repercusiones psicológicas para su salud.

El apego enferma, incapacita, elimina criterios, deprime, genera estrés, asusta, cansa, desgasta, y finalmente acaba con todo residuo de humanidad disponible. El hecho de querer ver a tu pareja, de andar arriba y abajo con él, que no ves las horas para besarlo, no significa que sufras de apego, si tienes a tu disposición a tu pareja, disfrútala, eso no es apego, pero si la urgencia de verlo no te deja en paz y tu mente se desgasta por él, bienvenido al mundo de los adictos afectivos.

Recuerden la idea no es reprimir el amor, sino la capacidad de soltarse cuando haya que hacerlo.

Brian Weiss – Muchos cuerpos, una misma alma




Brian Weiss se licenció en la Universidad de Columbia y cursó sus estudios de Medicina en la Universidad de Yale, es un médico psiquiatra Estadounidense, célebre autor de varios trabajos relacionados con el amor y la reencarnación.

Cobró notoriedad internacional con su investigación sobre el poder curativo de las regresiones a vidas anteriores, relatada en su célebre obra “Muchas vidas, muchos maestros”, manifestando que la regresión a vidas anteriores puede aliviar heridas físicas y emocionales que sufrimos en el presente.

Sigmund Freud afirmó que la mente funcionaba en distintos niveles, entre ellos lo que él denominó el inconsciente, así como su propio nombre lo indica, no somos conscientes, Freud comprobó que sólo si accedemos al inconsciente podemos descubrir quiénes somos para, con ello, alcanzar curación. Hay quienes han descrito que eso es precisamente el alma, el inconsciente.

El psiquiatra, afirma que todos somos inmortales, no refiriéndose a que antes de morir transmitimos nuestros genes, nuestras convicciones y nuestras costumbres a nuestros hijos y ellos, a su vez, a los suyos, aunque desde luego esto es así, sino más bien lo que quiere expresar es que la parte más importante del ser humano, el alma, vive internamente, Weiss señala que todos poseemos una alma que existe después de la muerte del cuerpo físico y que regresa una y otra vez a otros cuerpos en un intento progresivo de alcanzar un plano superior.

El psiquiatra practica la regresión por medio de la hipnosis, recreando una situación pasada en esta vida para hacer que afloren hechos desagradables sin sentimientos de culpa o vergüenza, lo importante es que aflorando ese shock traumático el síntoma presente desaparece y la persona mejora. Así por ejemplo, si el paciente narra que se ahogó en una vida pasada y esa es la razón de que le tenga miedo al agua ahora, ésta desaparecerá tanto si realmente el hecho ocurrió en una vida anterior si se trata de una recreación mental, ya que el alma registra las experiencias.

Jean Paul Sartre



“Los hombres pasan, los recuerdos quedan, como quedan las obras de los que algo hacen”.

Victor Montenegro: escritor argentino.

Jean Paul Sartre

El 15 de abril de 1980 falleció en París, víctima de un edema pulmonar de origen cardíaco, el gran filósofo, escritor y humanista francés Jean Paul Sartre, el más destacado representante del existencialismo y del “marxismo humanista”.

Sartre quedó huérfano de padre a los 15 meses, por lo que fue criado por su abuelo, quien le enseñó matemáticas y literatura clásica. Obtuvo un doctorado en filosofía (1929) en la elitista Ecole Normale Supérieurer de París.

Son muchas las brillantes aportaciones de Sartre al pensamiento de la humanidad. Recordemos que el existencialismo fue la corriente ideológica más influyente de la posguerra.

El fascismo alemán precipitó la Segunda Guerra Mundial y la destrucción de millones de personas y cuantiosos bienes, y conmovió la conciencia mundial. Sartre propuso un pensamiento que concebía a los seres humanos como seres que crean su propio mundo al rebelarse contra la autoridad y aceptar las consecuencias de sus acciones, sin respaldo de la sociedad, moral o religión.

“El ser humano nace libre, responsable y sin excusas”, el humano “es un proyecto, un ser que debe hacer-se”. Es interesante su diferencia con la corriente psicoanalista de Sigmund Freud, tan influyente por esos años. Freud pretende explicar el origen de los trastornos mentales por los conflictos sexuales y traumas de la infancia. Su perspicaz argumentación: “un ser humano adulto no puede ni debe estar defendiendo sus defectos en hechos ocurridos durante su infancia, eso es mala fe y falta de madurez”.

La filosofía de Sartre irrumpió en el momento histórico que el mundo necesitaba una revaloración integral del hombre y su destino. Para sus críticos Sartre encabezaba una corriente burguesa que propugnaba una cosmovisión pesimista de cómo debía vivir el hombre frente a las catástrofes históricas.

En la etapa de la globalización se ha producido un retroceso de la humanidad que obliga a replantear la necesaria vigencia del humanismo sartriano y del respeto a la dignidad y derechos humanos.

Sartre nos llama la atención a identificar debilidades inherentes a nuestra existencia social rutinaria, monótona y la “insípida obscenidad” que hasta la misma idea de la vida le causa “náusea”. Sartre es ejemplo de intelectual comprometido con las causas humanitarias: apoyó incansablemente la independencia argelina, se opuso a la guerra de agresión contra Vietnam, apoyó la Revolución Cubana, se manifestó contra el estalinismo, enunció al Premio Nobel de Literatura (1964) porque no quería afectar tu independencia.

Este luchador de la resistencia francesa antinazi y ex prisionero de los alemanes, a pesar de su gran forma, vivió modestamente. Más de 50,000 franceses lo acompañaron a su tumba en el cementerio Montparnasse.